viernes, 13 de febrero de 2015

Medicina y Cirugía estética: arte y desastre

Decía mi maestro, que cuando algo está bien, ya no debes tocarlo, pues, añadía, lo mejor es enemigo de lo bueno.

Esto es así, cuando estamos trabajando sobre un paciente, pero tiene aún mas valor, cuando “lo que está bien”, ya viene implícito de antes.

Cuando una parte de la cara o el cuerpo, es bello, entendiendo por bello el ser armónico, equilibrado, atractivo, sugerente, etc, ….¡ ¿para qué lo tocas?!

¿Piensas que lo vas a superar?, lo mejor es enemigo de lo bueno, y el tornillo de tanto apretarlo se pasa de rosca.

Alguien piensa de verdad, que el David de Miguel Ángel, se vería mejor sin los pliegues glabelares que lo caracterizan, o que la Venus de Botticelli, luciría mejor con unos labios mas gruesos?

Esto es el caso de los resultados pseudo estéticos de tratamientos que en los últimos días han saltado al dominio público realizados en famosos y que engrosan las lista del club de los de “Horror!, que te has hecho” : la Thurman, la Sweber, la Ryan, la Griffth, etc, etc.. Pero, cuantos no famosos hay deambulando por este mundo de Dios con los mismos resultados.

Y es que existe una gran diferencia entre aplicar técnicas y aplicar criterios. Los primeros se aprenden, los segundos……..  Ya lo decía nuestro Miguel de Unamuno. “lo que natura non da, Salamanca non presta”.

La medicina NO es una ciencia exacta, y los malos resultado en medicina y cirugía estética, existen, convivimos con ellos, todos los hemos tenido, y son justificables  cuando son atribuibles a complicaciones y a respuestas inesperadas de los tejidos vivos con los que trabajamos.

Cada paciente es un ente individual y tiene una carga genética y unos antecedentes  patológicos no siempre conocidos, que hacen que tenga su respuesta a veces no deseada ante una técnica y que desemboque en mal resultado.

Puede ocurrir también por la inexperiencia ante una técnica novedosa o con dificultad, puede que hayas tenido un mal día, pero si a esta mala suerte le das una ayudadita por error de criterio, …..vamos aviados.


 Venus  antes y después de implantes malar y labial. (Perdón Maese Boticelli)
David, antes y depués de aplicar relleno de ojeras y toxina botulínica en frente y glabela. (Perdón, maese Bounarroti)